miércoles, 27 de mayo de 2009

Tinted windows


Un grupo con James Iha (smashing pumpkins), junto a Adam Schlesinger (Fountains of Wayne, Ivy, The wonders) y cantando uno de los Hanson Brothers.

Interesante combinación

miércoles, 13 de mayo de 2009

Jonathan Richman



Alguno se acordará de esta canción enconcreto porque durante algún tiempo sonaba en mi coche una y otra vez, luego se le pudo ver en Algo pasa con Mary.
Viendo el video su manera de bailar me recuerda mucho a Moi... ¿verdad?

The very most.



El nombre del grupo ya lo dice todo...

Bishop allen.



El pop superando al pop.

domingo, 10 de mayo de 2009

La mujer orquesta.

lunes, 4 de mayo de 2009

Reflexiones sin pensar (15)

El perro salchicha seguía obsesionado porque olía siempre a comida y no sabía de donde provenía...

martes, 14 de abril de 2009

The Duchess

¿Por qué? Porque la considero el mejor ejemplo para definir qué es una película gris según mi forma de verlo.

El antepasado de Lady Di

Así es como han vendido la película que muy poco tiene que ver con el tema del que trata: La historia de una muchacha casada con un Conde para darle un progenitor y que parecía que sólo le daría niñas. Eso le lleva a un matrimonio sin amor del que trata de escapar con un joven amante mientras su esposa le engaña con otras.

Efectivamente la historia tiene muy poco de original, pero para definir el tema que nos ocupa no basta. Esta película es gris porque a nadie le importa realmente lo que pasa en ella, no hay empatía ni se sienten atraídos por los personajes.

Ésta es la teoría, pero ¿cómo verlo en la práctica? Cuando una película dura dos horas y acaba con unos títulos que explican qué fue de los personajes en el futuro. En algunos casos lo que te cuentan es importantísimo, la evolución de lo que han vivido ante nuestros ojos les lleva a un destino inexorable; En otras es un pitorreo, no sabían cómo acabarlo y se ríen de los que han seguido horas y horas de película (LEX es un ejemplo) y por último está este caso, donde los títulos no aportan nada. Es como si lo que te dicen ya lo supieses y, no sólo por cómo acaba la película, sino casi desde el principio.

Una pena, porque lo cierto es que fui a verla con ganas de ver una película de época y me encontré saliendo con ganas de ver de nuevo Maria Antonieta.